Linterna de Popa 491
Jorge Baca Campodónico
Abril de 2025
Zonas Económicas Especiales Privadas
¿Mercantilismo o innovación tecnológica?
En esta entrega analizamos la reciente ley dada por el Congreso para la creación de Zonas Económicas Especiales Privadas (ZEEP). Nuestra conclusión es que la norma aprobada no cumple las condiciones necesarias para lograr una verdadera industrialización en el Perú. La nueva ley dista mucho de los marcos normativos de experiencias exitosas, como las de China y otros países asiáticos, así como las recomendaciones de estudios recientes de destacados economistas. Una vez más el Congreso aprueba una norma mercantilista y populista que va en contra del desarrollo del país.
La norma aprobada se enfoca principalmente en ofrecer beneficios fiscales e incentivos a los operadores y usuarios de las Zonas Económicas Especiales Privadas (ZEEPs) y apunta a crearlas en cada región del país, similar a los regímenes de maquiladoras o zonas francas del pasado, solo que, ahora, éstas van a estar a cargo de operadores privados, con claro sesgo de negocio inmobiliario. La normativa no aborda la necesidad de fomentar la transferencia tecnológica, la formación de clústeres y la innovación, aspectos que son esenciales para que la inversión en las ZEEPs contribuya a una verdadera industrialización del país. La norma tampoco salvaguarda el impacto ambiental asociado a estas zonas.
Al no tomar en cuenta la importancia de la innovación, la nueva ley desaprovecha los resultados de investigaciones recientes sobre políticas económicas, como la realizada por Stefanie Stantcheva, reciente ganadora de la medalla John Bates Clark, otorgada anualmente por la Asociación Americana de Economía, al economista estadounidense, menor de cuarenta años, que haya realizado contribuciones significativas al pensamiento y conocimiento económico. La medalla se considera un paso previo a la obtención del Premio Nobel de Economía.
El trabajo de Stantcheva aporta nueva evidencia empírica sobre cómo las tasas de impuestos sobre la renta influyen en el comportamiento tanto de las empresas como de los inventores, debido a que la tributación incrementa el costo de desarrollar inventos e implementar innovaciones que se traduzcan en significativos aumentos de productividad.
Sus principales hallazgos muestran que los impuestos afectan la innovación tanto a nivel macro (país) como micro (inventores y empresas). A nivel macroeconómico, el aumento de los impuestos se asocia a una disminución de las patentes, de las citas en trabajos de investigación y del número de inventores e innovadores, así como una disminución de la inversion privada. A nivel microeconómico, las tasas impositivas más altas disminuyen la probabilidad de tener patentes de alta calidad. Como consecuencia los incentivos a la inversión deben ser focalizados a la promoción de la innovación y el aumento de la productividad.
La investigación de Stantcheva subraya la importancia de comprender la relación entre la política tributaria y la innovación para tomar las decisiones políticas apropiadas. Su trabajo abre el campo para futuras investigaciones sobre la movilidad internacional de inventores y empresas y el impacto global de los cambios impositivos.
¿Por qué el trabajo de Stantcheva es relevante para conocer si el marco normativo para la creación de las ZEEPs es una buena o mala práctica? Lo más relevante es que los incentivos tributarios deben promover prioritariamente la innovación y transferencia tecnológica para que tengan un efecto real sobre la productividad y el desarrollo de un país. Lamentablemente, el marco normativo aprobado por el Congreso no cumple con estas condiciones.

Las Zonas Económicas Especiales (ZEE) han sido una estrategia ampliamente utilizada por los gobiernos, especialmente asiáticos, que buscan acelerar la industrialización, promover la transferencia de tecnología y atraer inversión extranjera para impulsar el crecimiento económico. Las ZEEs pueden conducir a una rápida industrialización, creación de empleo, innovación y una mayor transferencia de tecnología. Países como China, India y otros países asiáticos han aprovechado con éxito las ZEEs para transformar sus economías, mediante “joint ventures” con empresas multinacionales. La presencia de empresas multinacionales también fomenta el desarrollo de habilidades entre los trabajadores locales y mejorara su productividad.
La inauguración del Mega Puerto de Chancay (MPCH), la membresía del Perú a la APEC y el próximo TLC con la India brindan oportunidades únicas que no deben ser desperdiciadas. Lamentablemente, la norma sobre la creación de ZEEPs aprobada por el Congreso, se asemeja más a los modelos de zonas francas del pasado que han fracasado en el país y que solo alientan el mercantilismo. La proliferación de ZEEPs por todo el país no solo es una amenaza para la recaudación tributaria sino que será fuente de especulación inmobiliaria que inducirá más corrupción.
La experiencia internacional nos dice que las ZEEs deben promover la formación de clústeres alrededor de grandes empresas innovadoras que posibiliten la transferencia de tecnología y el aumento de la productividad mediante la provisión de adecuada infraestructura productiva. La proliferación de ZEEPs va en contra de este objetivo.
El establecimiento de ZEEs debe contemplar la creación de “clústeres” tecnológicos asociados a las actividades económicas que se establezcan en las ZEEs. Un ejemplo es la producción de vehículos de transporte eléctrico, orientada no solo al mercado de exportación sino también al mercado doméstico. Alrededor de esta actividad se puede crear un clúster de producción de baterías con tecnología avanzada, que utilicen nuestra producción de minerales. Asimismo, la producción de autopartes asociados a la producción de vehículos eléctricos pueden ser parte de este clúster.
La obligatoriedad de que sean empresas conjuntas (Joint ventures) con capital peruano, no solo permitiría al capital doméstico participar de las ganancias de esta diversificación productiva, sino que, además, se generarían empleos productivos y se establecería un medio de transmisión del conocimiento de las empresas extranjeras, haciendo posible la futura generación de tecnología nacional, como ha sido la experiencia china, que en pocos años ha pasado a dominar el mercado mundial.
En última instancia, el éxito de las ZEEPs para promover la industrialización depende de cómo se estructuren y regulen. Las zonas bien planificadas, que propicien la innovación y la transferencia tecnológica, con una adecuada provisión de infraestructura, con una gobernanza sólida, protecciones ambientales y políticas laborales adecuadas, pueden servir como poderosos catalizadores para el crecimiento. (El contenido de esta columna se puede consultar en http://www.prediceperu.com/).